Capítulo 31

Enero de 1962 

-Narra John-
En cuanto el sol entró por la ventana de la furgoneta mis ojos se abrieron. Después de preguntarme donde estaba y ver que por lo menos no estaba sólo intenté levantarme, pero la cabeza de Paul, apoyada en mis piernas, me lo impedía. ¿Dónde estoy? Me pregunté. Lo pensé durante un minuto y me di cuenta de que ese día era el gran día. ¡El gran día! Me entraron ganas de gritarles a todos esos inútiles que despertasen, ¡era el gran día! Y todos os preguntaréis: ¿qué gran día? Pues ¡el gran día! ¡El día de nuestra prueba en Decca! Aún que no quisiese admitirlo estaba nervioso, muy nervioso. Era nuestra oportunidad para triunfar y no quería estropearla, ni que ninguno de nosotros lo hiciese, claro. Confiaba en Brian, nos había ayudado mucho en los pocos, apenas tres meses, que llevábamos juntos, ¡hasta nos había conseguido una prueba en una discográfica! Aquel chico sin duda tenía que tener algo especial, o bueno, más de una cosa; había notado un comportamiento "extraño" en él, quizá era sólo cosa mía, pero ese chico me parecía algo...¿gay? No quería parecer homófobo ni nada, pero, bueno, desde el instituto había visto mal a la gente así, no era algo común en esa época y alguien que sería mundialmente conocido, como Brian, por cierto, lo sería por ser nuestro representante, ¡íbamos a ser famosos! La sangre corría rápido por mis venas y mi corazón latía rápido, parecía que quería salirse de mi pecho. 
Veía pasar montañas, árboles, prados verdes...¡Lennon, en que mierda te estás fijando! Quizá eran los nervios, yo nunca solía pararme a mirar cosas como...como..la naturaleza. Pero aquel era un buen momento para empezar a hacerlo, así que seguí mirando por la ventana, esperando a que los demás se despertasen.
Poco después noté movimiento sobre mi pierna, parecía que "La bella durmiente" se estaba despertando, así que le ayudé un poquito, tirando de su blanda mejilla.
Paul: asdfghjkl Karo...Karo... - estiró sus labios como si fuera a dar un beso, no sabía que estaba soñando, o más bien del sueño del que se estaba despertando, desde que "salía" con aquella chica solo pensaba en ella - Karo....bésame
John: ¡DESPIERTA MCCARTNEY QUE ES EL GRAN DÍA! - dije poniendo mi mano sobre sus labios y notando como los movía 
Paul: pero...pero...¿qué hago aquí? - dijo Paul extrañado, sí que tenía que ser bonito su sueño, pensé 
John: vamos de camino a Londres, para ir a los estudios Decca, ¿no lo recuerdas? ¡ES EL GRAAAAAAAAN DÍA! - grité a todo pulmón, haciendo que los demás también se despertasen
George: venga...cinco minutos más...
Pete: joder Lennon, cierra la maldita boca antes de que te la cierre yo - dijo entre sueños y con un tono algo malhumorado
John: uuh, parece que hoy nos despertamos todos con el pie izquierdo, ¡VENGA CHICOS! - levanté la voz - ¡ES EL GRAN DÍA, NUESTRO GRAN DÍA! Tenemos que darlo todo en esa audición ¿no? ¡ES NUESTRA GRAN OPORTUNIDAD! - seguí gritando
Paul: - abrió los ojos de vez - ¡EL GRAN DÍA! - se incorporó y le dio un golpe a John - ¡EL GRAN DÍA!
John: - le miró molesto - eso os estoy diciendo ¿no? - le tiró del moflete - despierta Mcca, que tenemos que dar lo mejor
Todos asintieron y se empezaron a despertar. John, ya bastante despierto, seguía mirando por la ventana y pensando qué pasaría a partir de aquel día, ¿serían famosos? 

- Hamburgo -
Louise se despertó entre los brazos de Mick y lo miró sonriendo, besó su barbilla lentamente y aspiró el aroma de su colonia. ¿Cómo olería John? Esa pregunta salió de su interior sin que ella supiese como; había veces que simplemente se le venía el nombre de aquel chico de Liverpool a la cabeza, que empezaba a pensar en él. Siempre se terminaba preguntando por qué pensaba en él, qué tenía aquel chico que le volvía loca. ¿No le llegaba con Mick? Amaba a Mick pero a veces se preguntaba si también amaba a John, y temía mucho la respuesta que su corazón podía dar a esa pregunta. Quizá, si le hubieran preguntado unos meses antes, la respuesta había estado clara: sí, le amaba. Pero ahora que tenía a Mick estaba muy confusa y no sabía cuales eran mis sentimientos .



SIENTO MUCHO NO HABER SUBIDO TODO ESTE TIEMPO, PODEIS MATARME D: Me odio u___u COMENTAD POR FAVOR

Capítulo 30 - So this is Christmas - Part 2

Mimi no aceptaba que John saliese con ninguna chica, ella creía que todas las chicas eran poco para su Johnny; por eso Cynthia y él tenían que verse a escondidas.

-24 de Diciembre de 1961, narración de un narrador que lo ve todo (?-
En Hamburgo las cosas iban a salir como estaban esperadas, las cuatro chicas habían preparado una cena perfecta, comida típica alemana, cortesía de Atrid, comida típica inglesa, preparada por Louise y Javi, aún que ella también hizo comida típica española, su madre le había enseñado a prepararla cuando era más joven. Hay que aclarar que la madre de Javi tenía sangre latina, había nacido en  y comida típica francesa preparada por Julia especialmente para Joseph. Las chicas se habían arreglado y se habían puesto sus mejores vestidos, unos zapatos de tacón y se habían peinado de la mejor manera que sabían.
Astrid iría con Stu, Julia estaría con Joseph y Louise pasaría la noche con Mick. Las tres, emocionadas y felices, decoraron la casa y a las siete tenían todo listo para la llegada de sus parejas.
A las once ya habían terminado de cenar y estaba hablando alegremente mientras bebían un poco de champán. Todos contaban historias, quizá Joseph y Louise eran los que más tenían que contar, ya que eran de fuera de Alemania, pero todos se divertían con las historias de Mick, y Astrid tenía anécdotas muy curiosas sobre como habían conocido el barrio de Saint Pauli, el más famoso y extravagante de Hamburgo. 
A las doce en punto todos cogieron sus regalos y se los repartieron. Eran los típicos regalos de Navidad, nada extraño ni fuera de lo común: joyas, ropa, música, comida...
Mientras en Liverpool los chicos habían salido después de cenar con su familia, los cuatro juntos. Con ellos iban Cyn y Karo, George iría a buscar a Lory cuando todos estuviesen reunidos. 
Los seis fueron a casa de Lory y, cuando ella estuvo lista, fueron a pasear por Liverpool, buscando un buen bar donde tomar algo. Paul miraba a Karo de reojo y sonreía, dudando si cogerla de la mano o no. Era Navidad ¿no? Se dijo a sí mismo. Era una de las mejores épocas del año, época de felicidad amor y estar en familia y quizás...¿decir lo que Paul sentía?
Karo: - miró para Paul y se rió - James, sé que soy guapa pero no hace falta que me mires todo el rato, no me voy a escapar - se rió
Paul: sólo... - movió el pelo como sólo él sabía hacerlo - sólo admiraba tu belleza - Karo se sonrojó - nos conocemos desde hace... - hizo memoria - desde hace doce años, somos amigos desde hace doce años y...desde el primer día he pensado que eres una chica muy guapa, adoro tu pelo, con ese tono rojizo y brillante - dijo pasando los dedos por el pelo de ella - y tan suave
Karo: Paul..¿a dónde quieres lle... - él la interrumpió cogiéndole de la mano
Paul: ¿contigo? Muy lejos. Karo... - cogió aire - me gustas, y desde hace mucho, pero tuviste aquellos novios que yo odiaba y luego perdimos el contacto... - suspiró - pero ahora hemos vuelto a estar juntos y creo que podríamos intentar algo
Karo: - le miró sorprendida, no sabía muy bien que decir o como reaccionar. Paul, su mejor amigo de siempre, el chico más guapo que ella había conocido y su amor desde muy joven le estaba diciendo que..¿le gustaba? Quería pellizcarse para comprobar que eso era verdad, no un sueño, pero cuando notó los labios de Paul sobre los suyos supo inmediatamente que no podía ser un sueño taaaaaan real, así que solo se dejó llevar -
Los otros miraban la escena sorprendidos, ninguno de ellos sabía que entre aquellos dos hubiera algún tipo de atracción, pero ese beso lo confirmaba todo.
John iba feliz, con la mano de Cynthia junto a la suya, pensando que aquello nunca cambiaría, que quizá pasaría el resto de su vida junto a aquella chica, que tanto había hecho por él; pero algo se le vino a la cabeza, recuerdos, momentos junto a Louise, ¿cómo estaría pasando aquella navidad? John supuso que junto a su adorado Mick pero... no era quien de ponerse celoso porque pasase tiempo con su novio, él mismo había empezado a salir con Cyn para no tener que pensar más en aquellos sentimientos que le atormentaban mientras dormía, componía y tocaba la guitarra, aquellos sentimientos de ¿amor? ¿deseo? ¿desesperación por no estar junto a ella? Muchos sentimientos juntos que le habían vuelto loco aquellos días en Hamburgo, pero ahora junto a Cynthia parecía que se habían calmado, pero no, la verdad es que no se habían calmado para nada, ¡SEGUÍAN AHÍ! John se lamentaba cada segundo que pensaba en Louise, pero en realidad estaba deseando que llegase el día que la volvería a ver, cuando pudieran volver a Hamburgo o ella volviese a Liverpool, quizá sería el momento de declararse.
George iba caminando a lado de Lory, sin saber que decir o hacer, ellos no eran novios, no todavía, y George ni siquiera sabía si eran amigos, ella era una chica extrañaba, pero eso era lo que le llamaba la atención de ella y lo que hacía que George quisiese pasar tiempo a solas con la joven. Quería aprender todo lo que Lory podía enseñarle.

Los días pasaban en Liverpool y en Hamburgo, y el año nuevo llegó antes de lo esperado, y con él una gran sorpresa: ¡LA PRIMERA PRUEBA PARA UNA DISCOGRÁFICA DE LOS BEATLES!

Enero de 1962 

-Narra John-
En cuanto el sol entró por la ventana de la furgoneta mis ojos se abrieron. Después de preguntarme donde estaba y ver que por lo menos no estaba sólo intenté levantarme, pero la cabeza de Paul, apoyada en mis piernas, me lo impedía. ¿Dónde estoy? Me pregunté. Lo pensé durante un minuto y me di cuenta de que ese día era el gran día. ¡El gran día! Me entraron ganas de gritarles a todos esos inútiles que despertasen, ¡era el gran día! Y todos os preguntaréis: ¿qué gran día? Pues ¡el gran día! ¡El día de nuestra prueba en Decca! Aún que no quisiese admitirlo estaba nervioso, muy nervioso. Era nuestra oportunidad para triunfar y no quería estropearla, ni que ninguno de nosotros lo hiciese, claro. Confiaba en Brian, nos había ayudado mucho en los pocos, apenas tres meses, que llevábamos juntos, ¡hasta nos había conseguido una prueba en una discográfica! Aquel chico sin duda tenía que tener algo especial, o bueno, más de una cosa; había notado un comportamiento "extraño" en él, quizá era sólo cosa mía, pero ese chico me parecía algo...¿gay? No quería parecer homófobo ni nada, pero, bueno, desde el instituto había visto mal a la gente así, no era algo común en esa época y alguien que sería mundialmente conocido, como Brian, por cierto, lo sería por ser nuestro representante, ¡íbamos a ser famosos!



SIENTO HABER TARDADO EN SUBIR, PODEIS MATARME SI QUEREIS, PERO EN EL CAPÍTULO ANTERIOR NADIE COMENTÓ u___u ESPERO QUE EN ESTE SÍ.
MUCHOS BESOS Y GRACIAS POR LEER :3
Aquí os dejo mis blogs:
Four of us (con Beatriz): http://youllneversingalone.blogspot.com.es
Stairway to mystery (con Carolina): http://ledbeatle.blogspot.com.es/

¡Hola! ¡Nuevo blog!

Hola a todas, ¡tengo una muy muy buena noticia! Beatriz y yo hemos decidido hacer un blog juntas. El blog se llama 'Four of us' y, como no, tendrá como protagonistas a nuestros amados Beatles y muchos otros artistas de esa época.

El fic contará lo que ocurre cuando dos historias completamente diferentes se juntan. La vida de Mary y la de vida de Beatrice se encontrarán cuando ambas menos se lo esperan.

Espero que os paseis a leerlo. ¡Gracias! Aquí teneis el link: Four of us (You'll never sing alone)

Un saludo, espero subir pronto, ¡lo antes posible!
 

Capítulo 29 - So this is Christmas

-Narra Louise-

Navidad. Esa época del año en la que las familias se reunían y demostraban su amor. También era época de hacer regalos. Me acordaba de como de pequeña hacia la lista con todos los juguetes que quería y como mis padres se volvían locos buscándolos todos. Ahora era yo la que me volvía loca buscando los regalos que creía adecuados para todos. Había quedado en pasar la navidad en Hamburgo, aún que tenía algo de dinero ahorrado no quería gastarlo en eso. La calle principal estaba llena de gente, la mayoría cargada con bolsas. Los niños pequeños corrían de escaparate a escaparate y se apoyaban en el cristal mirando los maravillosos regalos que anhelaban. Yo también me paré en un escaparate. Era la tienda favorita de los chicos. Había una guitarra acústica muy bonita apoyada en su funda. Sin pensarlo dos veces entré en la tienda y me dirigí al mostrador. 

Louise: perdone señorita, ¿cuánto cuesta la guitarra acústica que tienen en el escaparate? 

X: - miró la lista de instrumentos y luego me miro a mi - son 200€ 

Louise: - pensé si podía permitirme gastar esa cantidad de dinero en el regalo de mi hermano -... Vale, pues me la llevo 

La dependienta cogió la guitarra, la guardo en la funda y me la entregó. Pagué y salí de la tienda. Bien, sólo faltaban... Demasiado regalos. Me paré un momento y me senté en un banco y cerré los ojos. ¿Cómo iba a encontrar el regalo perfecto para cada uno? Pasé la mañana entera comprando. ¡Ya tenía el regalo perfecto para todos! Volví a casa agotada. Julia y Javi estaban sentadas en un sofá hablando y riendo. 

Louise: ¡hola! ¡Ya he vuelto! 

Javi: ¿ya tienes todos lo regalos? 

Louise: ¡SÍ! - Subí corriendo a mi habitación y dejé las bolsas en la cama, volví abajo corriendo, me quite el abrigo y la bufanda y me senté en el sofá que estaba enfrente de ellas -todos comprados - sonreí 

Julia: ¡ahora tendremos que comprar adornos! 

Javi: ¡sí! Vi una tienda que tenía de todo - los ojos le brillaban con emoción 

Louise: perfecto, iremos mañana 

Javi: oye... Se me acaba de ocurrir una idea... 

Julia: dinos 

Javi: cada una va a pasar ese día en un sitio diferente, pero todas a solas con nuestros novios, y si... 

Louise: ¿y si...? 

Javi: ¿y si nos reunimos los seis aquí? 

Miré a Julia y luego a Javi. Sonreí. 

Louise: ¡claro que sí!

-Narra Julia-

Seguíamos sentadas. Louise había preparado té.

La idea de pasar la Nochebuena juntas no era mala. Ninguna de las dos conocía a mi actual novio. Después de salir con Jakob, mi primer novio oficial, todo había ido de mal en peor. Os contaré la historia: había conocido a Jakob en el cine. El mismo día que nos conocimos nos dimos cuenta de que teníamos muchos gustos comunes. Me había enamorado de él inmediatamente, a mis ojos era el chico ideal, pero mis amigas decían que no confiase en él. Después de varios días empezamos a vernos más a menudo y a salir. Éramos como almas gemelas. Pasábamos día y noche juntos. Confié tanto en él que dejé que me convirtiese en mujer, ya me entendeis, y ahí fue lo mejor de nuestra relación; pero desde ese momento Jakob se volvió mucho más violento, en ese momento todo empeoró. Me gritaba y obligaba a hacer cosas que no quería, pero aún así yo le seguía amando. Llegó un momento en el que me pegó y me dejó tirada en mi casa. Después de eso rompimos, o por lo menos no nos vimos más. Tenía el corazón roto y estaba completamente destrozada. Cambié completamente y salí con todos los chicos que podía, uno tras otro sin parar, todas las noches con alguien diferente. No fui feliz de verdad hasta que encontré a Joseph, mi actual novio, un chico francés de ojos verdes y pelo negro, muy dulce y trabajador, un caballero. Cuidó de mi cuando necesitaba ayuda. Eso es lo que más me había enamorado de él.

Louise: ¿en que piensas Julia? Estás muy concentrada - se rió y ambas me miraron intrigada

Julia: nada chicas, solo... en Joseph

Javi: háblanos de él - se acercaron a mi

Julia: es francés, tiene el pelo negro azabache y los ojos verdes. Estudia comunicaciones en la universidad y... no sé, es muy dulce y me cuida mucho - sonreí como una tonta

Louise: que tierno - sonrió

Pasamos el resto de la tarde hablando y haciendo lo típico de chicas.

-Narra Paul-
Desde que mi madre había muerto la Navidad en nuestra casa era algo triste, ella era la que llenaba de alegría esta época. A pesar de las quejas de mi padre, Mike y yo habíamos puesto los adornos y arreglado un poco la casa.
Era un lunes y ese día no teníamos que actuar, así que decidí salir a pasear por Liverpool. Cogí mi bufanda azul y mi abrigo, me coloqué un poco el pelo y salí a la calle. El frío de la ciudad me golpeó la cara. Saqué la cajetilla de cigarros y comprobé que estaba vacía. Maldeci en voz baja y busqué la tienda más cercana. Entre y compre dos cajetillas más, al salir cogí un cigarrillo y lo encendí. Le di dos caladas y caminé un poco a sabe dios donde.
Casi todas las tiendas estaban decoradas con pequeñas lucecitas parpadeantes, todas llamaban la atención. Había comprado todos los regalos, todos menos uno... El de Karo era el que más me iba a costar elegir. Tenía que ser algo que dijera "somos amigos pero siento que también somos algo más, porque tus ojos y los míos conectan cuando nos miramos y nuestros corazones laten a un mismo ritmo, tu sonrisa me dice que lo que digo te llega al corazón y..." creo que ese regalo decía demasiado... Simplemente sería un collar... ¡Sí, eso! ¡Un collar! Un collar con su nombre... O un collar que pusiera algo bonito... O un collar con un corazón; no, eso era demasiado romántico.
Después de comprar el collar, una carena de oro con su nombre, fui a comprar algo de comer.
Cuando pasaba por delante de casa de John salía él de allí acompañado de Cynthia. Mire para ellos y me reí.
John: ¿Macca?
Paul: ¡Hola chicos! Os veo muy... Eh... ¿Juntos?
John: inteligente Paul, muy inteligente tu respuesta
Paul: - me volví a reír - hola Cynthia
Cynthia:  hola Paul - cogió la mano de John y sonrió tímidamente
Paul: ¿no está Mimi?
John: no, está de compras
Paul: ¡genial!
Mimi no aceptaba que John saliese con ninguna chica, ella creía que todas las chicas eran poco para su Johnny; por eso Cynthia y él tenían que verse a escondidas.

Capítulo 28

Mientras en Hamburgo...

-Narra Javi-
Hamburgo. Ahora me parecía demasiado grande. Fumaba en el parque, el más cercano a mi casa. Era todo tan aburrido. Louise estaba con Mick, como todas las tardes. Miré las palomas comer los trozos de pan que las ancianas les lanzaban. No sabía muy bien que hacer. Desde el día que se había ido Richie había decidido encontrar un trabajo. Había dejado la Universidad, no pintaba nada en un lugar como ese, mi destino era algo relacionado con la música. 
Aún me acordaba de aquel día en el que conocía a Jonah, mi profesor de bajo.

-Flashback-
Otra noche aburrida en casa sin Louise y sin Richie. ¿Ahora que hacía? Me metí en la ducha, siempre me ayudaba a pensar, y me dejé llevar por el agua que recorría mi cuerpo. Podría leer un rato. Lo pensé mejor. ¿A quien quería engañar? ¡Yo quería salir de fiesta! 
Salí corriendo de la ducha y me dirigí al pequeño armario de mi habitación. Saqué unas prendas de ropa tras otra hasta que encontré el conjunto perfecto. No era de esas chicas que les gustaba llevar vestidos, así que al final me decidí por unos pantalones negros y un jersey de cuello alto blanco, con unos sencillos zapatos negros. Dejé que mi pelo quedase suelto y me retoqué un poco el maquillaje de los ojos. Eso era suficiente.
Aun que fuera Julio, no hacía mucho calor por las noches y el frío me golpeó la cara. 
Sonreí en cuanto vi el ambiente que había en el centro de la ciudad, todos eran felices y disfrutaban de su juventud. Decidí unirme a ellos. Pedí una copa y me la bebí de un trago. El alcohol me recorrió la garganta, quemándola lentamente y cerré los ojos. 
Camarero: perdone señorita, esto es para usted - me pasó una copa con un trago de Wishkey 
Javi: ¿para mi? - abrí los ojos sorprendida 
Camarero: sí, de aquel chica - me señaló un joven rubio que estaba con sus amigos al otro lado de la barra- Le miré y le sonreí en señal de agradecimiento.
Bebí la copa y sentí a alguien detrás de mi. Me giré y estaba el joven detrás de mi. 
Javi: hola, gracias por la copa 
x: no las des - sonrió - soy Jonah, ¿y tu bella dama, tienes nombre? 
Javi: - asentí - Javi 
Jonah: ¿eres de por aquí? - negué con la cabeza - ¿entonces de donde?
Javi: Liverpool, en Inglaterra
Y así seguimos hablando durante horas. Jonah era encantador, pero no quería nada con él, amaba a Richie. 
Jonah: y así aprendí a tocar el bajo
Javi: ¡que suerte tienes! Yo quiero aprender a tocar algún instrumento, pero no tengo quien me enseñe - me encogí de hombros
Jonah: - parecía que pensaba algo - ¡yo puedo enseñarte! - sonrió ampliamente
Javi: ¿de verdad? ¿Crees que eres capaz de enseñar a alguien tan torpe como yo? - asintió - ¡pues intentémoslo! 

-Fin del flashback-

Había sido una situación graciosa donde las haya, había salido de casa como Javiera y había vuelto a casa como una futura bajista. Me reí ante aquel ingenioso pensamiento y seguí fumando. Miré hacia la casa y vi a alguien tocando insistentemente la puerta. ¿Quien sería? Decidí acercarme a ver. Cuando estaba detrás de esa persona puse mi mano en su hombro y se giró.
Javi: ¡RICHIE! - me tiré a sus brazos, que se abrieron en cuanto me vió. 
Ringo: ¡Javi, amor mío! - me besó y acarició lentamente mi mejilla - ¡te eché anto de menos! No había ningún día que no pensase en ti - volvió a besarme y yo sonreí
Javi: venga, pasa - entramos los dos - te prepararé algo
Corrí a la cocina y le preparé una cerveza y unas patatas fritas. Volví corriendo y le di su comida. Hablamos durante horas. Me contó todo lo que había hecho en esos últimos meses, como habían tocado y que cada vez eran más famosos, pero The Beatles les estaba robando protagonismo. Se me escapó la risa ante aquella ocurrencia, le callé con un beso, un dulce y tierno beso. El beso se fue tornando más desesperado, supliendo todos los que no nos habíamos dado en los últimos años. Acaricié su pecho y subimos las escaleras sin separar nuestros labios. Acabamos tirados en la cama, desnudándonos el uno al otro. Observé su cuerpo una vez más y me reí mientras el besaba mi cuello. Me agarré a sus hombros y se los acaricié mientras me penetraba como una auténtica bestia. 
Después de varias horas acabamos los dos exhaustos tirados en la cama, yo apoyada en su pecho y el con los brazos alrededor de mi cuerpo.
Ringo: te amo Javi - me besó
Javi: te amo Richie - besé su barbilla
Louise: - entró en la habitación riéndose - ¿iba siendo hora de que acabaseis no?

¡HOLAA! He vuelto!
Espero que os haya gustado el capítulo, especial para mi amiga Javi, ¡QUE ESTÁ HOY DE CUMPLEAÑOS! ¡FELIZ 16 CUMPLEAÑOS AMIGA! Te quiero mucho :3 ¡FELICITADLA!
Comentad :)

Capítulo 27

LO QUE ESTÁ EN CURSIVA ES LO QUE PIENSA EL PERSONAJE

-Narra John-

Había ido a por Cynthia un poco antes de lo necesario, algo raro en mi, para poder estar solos un rato. Había olvidado lo divertida que era esa chica, y lo bien que besaba. Habíamos llegado un poco antes a Strawberry Fields así que nos sentamos en un banco a esperar. Ella hablaba y yo solo miraba al frente y fumaba, asintiendo de vez en cuando con la cabeza para que viese que la estaba escuchando.

Como vimos que iban a tardar en llegar decidimos entrar en Strawberry. Saltamos la oxidada verja roja y corrimos por los verdes campos cogidos de la mano. Al llegar a donde antes estaba el orfanato nos sentamos en las escaleras de entrada y le cogí la mano. Nos besamos  y abrazamos allí sentados.

Repasé en mi mente todo lo que había pasado en los últimos meses, desde la primera vez que fuimos a Hamburgo hasta ese día. 

Relajé mi mente mientras inhalaba el humo de mi cigarrillo, intenté notar los latidos de mi corazón, seguramente lentos, relajados. Pensé en ella, Louise. Louise. Mary. Harrison.  Ahora salía con el pesado de Mick, no es que no fuese agradable, la verdad parecía un buen tipo, pero que estuviera con Louise era algo que en el fondo, muy en el fondo, me dolía, y era algo que nunca querría admitir. Mis ojos vagaron hasta Cynthia que fumaba y miraba a su alrededor. Ella era una buena chica, quizá demasiado buena para mi... pero.... si ella era buena, Louise lo era más... Pero había cambiado tanto en los últimos meses. Y no era yo el hombre que estaba a su lado para ayudarla en cada momento. Agg, ¿por qué demonios pensaba yo eso en ese momento? Suspiré en alto y seguí fuamando.

Noviembre

-Narra Louise-

Mick y yo habíamos vuelto a Hamburgo en Septiembre, para volver a empezar el curso. Había dejado a mi hermano y a los chicos en Liverpool. Tras una dulce y algo triste despedida me volví a Hamburgo con una caja llena de sandwiches y mi novio. Novio. Que raro sonaba decirlo... Mi novio... Mi... Sólo mío. 

Como cada mañana me levanté, ahora vivía en el piso de Mick. Bajé y lo primero que vi fue un sobre tirado en el suelo del recibidor. Me acerqué y lo cogí. Miré la persona que lo enviaba e inmediatamente corrí a la cocina para abrirlo. Me preparé un té y me senté a leer con la taza humeante entre mis manos. Empecé a leer la carta:

Hola Lou,

Todo va muy bien por Liverpool, las cosas no han cambiado mucho por aquí, Paul sigue tan femenino como siempre, tú ya me entiendes, y ahora anda como una adolescente con el período, va a tener una cita con su amiga pelirroja, Karo. Creo que estoy algo celoso, pero se me pasará.

 Mi corazón latía muy rápido a medida que iba leyendo la carta.

Pete sigue siendo el que más atrae a las chicas, siempre rodeándole y riéndose como tontas, pero no me parece mal, sabes que yo tengo mi chica. 

El otro día apareció en The Cavern un chico que se hacía llamar Brian Epstein. Todo vino por aquel disco que grabamos con Tony Sheridan en Hamburgo, no sé si te acordarás. Bueno, pues un chico fue a su tienda, ese Brian tiene una tienda de discos cerca del local y alguien entró preguntando por nostros, ¡¿te lo puedes creer?! ¡PREGUNTARON POR NOSOTROS EN UNA TIENDA DE DISCOS! Aún no me lo creo. Y al final va a venir a vernos otro día, no sé que interés puede tener un hombre como él en unos chicos como nosotros, ¡parece que nuestros esfuerzos se verán recompensados!

¿Cómo va todo por ahí? ¿Sigues siendo tan buena como siempre? Y Stu, ¿cómo están él y Astrid? 

Creo que ya tengo que irme, estoy esperando tu respuesta.

Muchos abrazos de John L.

Miré la caligrafía de la carta, sí, definitivamente la había escrito John. Pero, ¿por qué él y no mi hermano o Paul? Y, ¿quién era ese Brian? ¿De verdad estaba interesado en los chicos? 

6  Diciembre de 1961

-Narra John-

Solo una mesa nos separaba de lo que podría ser nuestro futuro. Tres folios y una firma determinarían si todos nuestros esfuerzos habían valido de algo. Miré las caras de mis compañeros. George, tan serio como siempre. Pete, indiferente. Paul, con sus largas pestañas, que escondían sus ojos color avellana, miraba hacia mi. 

-Narra Paul-

Mi corazón latía muy rápido, y mi pecho subía y bajaba rápidamente. Miraba el papel que tenía delante de mi, y aún no me lo creía.

-Narra John-

Estaba decidido a que triunfásemos. En mi vida me había esforzado tanto por una causa, y esta era MI causa. Conseguiría que Mimi estuviera orgullosa de mi, que mis tías vieran que el pequeño John había crecido y ahora su grupo iba a triunfar. Mi madre y el tío George, desde donde quiera que estuviesen, verían que John era capaz de hacer algo con su vida. Y si algún día mi padre se molestaba en interesarse por mi, sabría que su hijo era mejor que él, un verdadero artista.

Miré por última vez el papel, había demasiadas letras, estaba demasiado cansado como para leerlo todo, pero el señor Epstein me inspiraba confianza, así que supuse que no nos estaría engañando. 

Algo en mi interior me hizo aceptar, era todo lo que siempre había soñado, y alguien quería darme la oportunidad de cumplirlo.
John: aceptamos - dije convencido 
Paul: seguro John? - me miró y yo asentí - entonces aceptamos
George: como digan ellos - miró a Pete, quien se encogió de hombros
Cogí el bolígrafo y firmé el papel, se lo pasé a los chicos y también lo firmaron. El último en firmarlo fue Brian. Era, oficialmente, nuestro manager. 


Hace siglos que no escribía y teneis derecho a matarme, pero ahora intentaré escribir lo más seguido posible.
Muuuchos besos y gracias por leer. 

Capítulo 26

-Narra George- 

Caminaba perdido por las calles de Liverpool, no encontraba el puesto de helado en el que siempre compraba. Llegué al parque y vi el pequeño puesto ambulante que regentaba Larry, mi viejo amigo que siempre me vendía los helados. Me acerqué pero antes que yo se pusieron una chica con un niño. Pidieron un helado de chocolate y cuando se giraron después de pagar pude ver que esa chica me resultaba conocida, rubia, ojos azules...

Lory: George! - se dibujó una hermosa sonrisa en su cara - ¡Has vuelto de Hamburgo!  

George: sí, volvimos hace... cinco horas o así - me encogí de hombros y bajé la mirada

Lory: ¿te pasa algo conmigo? No respondías a mis cartas... - dijo mientras cogía al niño pequeño de la mano

George: ¿cartas?

-Narra George- 

Caminaba perdido por las calles de Liverpool, no encontraba el puesto de helado en el que siempre compraba. Llegué al parque y vi el pequeño puesto ambulante que regentaba Larry, mi viejo amigo que siempre me vendía los helados. Me acerqué pero antes que yo se pusieron una chica con un niño. Pidieron un helado de chocolate y cuando se giraron después de pagar pude ver que esa chica me resultaba conocida, rubia, ojos azules...

Lory: George! - se dibujó una hermosa sonrisa en su cara - ¡Has vuelto de Hamburgo!  

George: sí, volvimos hace... cinco horas o así - me encogí de hombros y bajé la mirada

Lory: ¿te pasa algo conmigo? No respondías a mis cartas... - dijo mientras cogía al niño pequeño de la mano

George: ¿cartas?

Lory: sí, te he mandado muchas cartas, le pregunté a tu madre la dirección, al parecer mi tía y tu madre son amigas - sonrió

George: pues no me llegó ninguna carta la verdad - miré al niño pequeño y este me sonrió desde  detrás de su helado 

Lory: oh, bueno, solo te preguntaba como te iba en Hamburgo y te explicaba porque aquel día no te fui a ver tocar - parecía algo avergonzada 

El recuerdo de como aquella noche me había dejado plantado volvió a mi mente y se me enrojecieron las mejillas. Metí las manos en los bolsillos y saqué un cigarrillo, sin preguntarle si quería lo encendí y me puse a fumar.

Lory: ¿quieres que te lo explique? - me encongí de hombros y me dispuse a escuchar - mi hermana mayor tuvo un accidente, iban ella y su marido en el coche y chocaron contra un edificio por algún motivo y... - hizo una pausa, miró al niño pequeño, me miró a mi y después volvió a mirar al suelo; bajó el tono de voz y siguió - y los dos murieron en el accidente, por eso no fui, intente que alguien te lo dijese, pero no conozco a muchas personas 

Eso que dijo me dejó completamente en shock. Había estado enfadado durante meses por una confusión, por una estúpida acción del destino. Había buscado escusas para disculparla y había hablado mal de ella tantas veces en mi cabeza por nada, ¿por qué siempre era tan estúpido?

George: lo siento Loriet - buscaba algo inteligente que decir - no lo sabía, lo siento - ella sacó un pañuelo y se secó las lágrimas que se le habían escapado e intentó sonreír

Lory: no pasa nada George, intentamos olvidarlo - pasó su mano por el pelo del niño - él es mi sobrino, se llama Jack, tiene tres años - el niño miró hacia ella al oír que decía su nombre - ahora cuido yo de él, bueno, entre mi madre y yo

George: que bonito, encantado Jack - le sonreí y seguí fumando - te gustaría... bueno, ¿te gustaría pasear un rato? 

Lory: sí 

George: entiendo que no quieras, pero no es una cita, vamos a ir a The Cavern a escuchar buena música y... un momento, ¡dijiste que sí! 

Lory: - se rió - claro, pero antes tendré que dejar a Jack en casa

George: te acompaño - empecé a caminar a su lado 

-Narra John-

Había ido a por Cynthia un poco antes de lo necesario, al raro en mi, para poder estar solos un rato. Había olvidado lo divertida que era esa chica, y lo bien que besaba. Habíamos llegado un poco antes a Strawberry Fields así que nos sentamos en un banco a esperar. Ella hablaba y yo solo miraba al frente y fumaba, asintiendo de vez en cuando con la cabeza para que viese que la estaba escuchando.

Como vimos que iban a tardar en llegar decidimos entrar en Strawberry. Saltamos la oxidada verja roja y corrimos por los verdes campos cogidos de la mano. Al llegar a donde antes estaba el orfanato nos sentamos en las escaleras de entrada y le cogí la mano. Nos besamos  y abrazamos allí sentados.

Capítulo corto, lo sé, podeis matarme si quereis jajajajajajaja, mejor no que si no no podré escribir estos capítulos tan asquerosos ;).

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Besos y gracias por leer!